Comienzan a acumularse en la superficie del planeta muchos cohetes, y mucha basura de cosmonautas. Los humanos solo sabemos dejar basura a nuestro paso. Los micro-plásticos vuelan por la atmósfera, ya llueve plástico, respiramos plástico, comemos plásticos. Los bosques y el Amazona se queman y respiramos humo. Nada nos quedará para ofrecerles a las futuras generaciones y nos cargamos el planeta. O hacemos algo para impedir que se destroce o, aquí no hay quien viva ¿Será por eso que no se traen hijos?
76 palabras
¡Hola!
ResponderEliminarTienes toda la razón, los humanos somos expertos en dejar basura en todas partes.
Un micro muy chulo y muy feliz lunes.
Hoy he visitado las Islas Cies y están muy bien cuidadas sobre todo de basura, pero un impresentable tiró una botella en las dunas. se veía algunas que otra colillas. Una pena
EliminarEs nuestra naturaleza, somos seres de acción y poca reflexión. La idea de progreso tecnológico fue demasiado deseable en su momento como para pararse a pensar en el impacto que ello provocaría en nuestro planeta. Y cada vez nos queda menos tiempo... Un micro para reflexionar, Carmen. Un abrazo!!
ResponderEliminarY tanto que reflexionar. hoy recogí junto con mi basura algunas colillas. Un abrazo.
ResponderEliminarUn relato denuncia, que a la vez es certeza de lo que somos: destructores. Lo que parecemos ignorar es que es nuestra propia casa la que está en ruinas.
ResponderEliminarAbrazo.
No sabemos lo que tenemos y qué poco aprecio le damos a este planeta. Tenemos que cuidarlo más y no preocuparnos tanto por lo que hay en otros planetas. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Mamen, cuánta razón tienes con tus palabras, el caso es que algo debe ocurrir. Ya hay medidas para evitar que se compre con tantas bolsas, es un pequeño paso, pero el cambio del clima y la especulación con las selvas sigue adelante. La forma egoísta de actuar del ser humano: yo vivo ahora el que venga que arree. Tú ya me entiendes. Gracias por leer el último relato, ese descubrir en espacios que muchos consideran desérticos, sin vida; caminar por estos lugares es una forma de abrir la conciencia, de respetar lo que nos rodea, ahora y los que no sucederán en el tiempo. Un beso grande, grande, grande.
ResponderEliminarEmerencia he estado muy ocupada y con vacaciones y poco tiempo para leeros. A ver si me pongo al día y normalizo todo. Un abrazo.
ResponderEliminarTu micro, Mamen, es para reflexionar largo y tendido porque es cierto que, pese al peligro que corre nuestro planeta, creo que no llegamos a ser plenamente conscientes de ello. De hecho, seguimos utilizando plástico, tirando toallitas al sanitario, esparciendo colillas en las aceras. Creo que un esfuerzo conjunto y serio pararía esta situación, pero...
ResponderEliminarUn besazo
Muy complicado lo tenemos si no hacemos un esfuerzo por dar un paso atrás y volver a la compra con la bolsa que antiguamente iban nuestras madres. Sin darnos cuenta con la modernidad y la comodidad, yo diría mucho negocio para muchos ya que han creado fábricas para hacer utensilios de plásticos de un solo uso, como platos, vasos, cubiertos, pajitas, bolsas y envoltorios para todo tipos de cosas. Difícil la solución. Espero que poco a poco recapacitemos y usemos menos los plásticos y sobre todo no los tiremos en cualquier lugar. Un abrazo.
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