Ya llegamos al día 16 de septiembre y visitamos las deseadas Islas Cíes. Me pareció un entorno natural maravilloso con unas playas de arena blanca con un mar de agua transparente en azul turquesa, rodeada de unos bosques y eucaliptos no son autóctonos de la zona.
El día anterior ya habíamos cogido los billetes para embarcar sobre la 11:00 horas. Antes compramos una empanada de zamburiñas en una panadería cercana al puerto (por cierto muy buena) compramos el día que nos marchamos tres para llevar para casa.
Fuimos al muelle donde la Naviera Nabia nos vendió los pases. Embarcamos haciendo un paseo un poco más largo que el del día anterior a Cangas, muy agradable.
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| Mejilloneras de Cangas desde el barco |
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| Pasamos cerca de las mejilloneras y el faro |
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| El punto más alto de la isla |
Las Islas Cíes siempre han sido una maravilla natural asomada a la ría de Vigo. La calificación de una de sus playas, la de Rodas, como la “más bonita del mundo” por el conocido periódico británico The Guardian puso al archipiélago en el mapa internacional. Y la saturación que sufrieron en 2017 las colocó en boca de todos. La situación ha cambiado y desde 2018 es necesario un permiso de la Xunta de Galicia para acceder.
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Pepe antes de bajar del barco con la empanada
Las islas Cíes son un archipiélago situado en la provincia de Pontevedra al noroeste de la península en la boca de la ría de Vigo, parte de las rías bajas gallegas, formado por tres islas: Norte o Monteagudo, del Medio o do Faro y Sur o San Martín. Las dos primeras se encuentran unidas artificialmente por una escollera y naturalmente por el arenal de la Playa de Rodas. Están orientadas según un sistema de fracturas paralelo a la costa en dirección N-S. Distan aproximadamente tres cuartos de hora de viaje en barco y 14,5 km de la ciudad de Vigo Fueron declaradas parque natural en 1980, y están incluidas en el Parque Nacional de las Islas Atlánticas de Galicia, creado en 2002.
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Muelle en la isla
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En la pasarela de madera esperando reunirnos con las guías
Este ecosistema marítimo-terrestre alberga un gran bosque de laurel, eucalipto y más de 200 especies de algas marinas. También destaca por poseer moluscos, corales y anémonas. En cuanto a lo terrestre, se pueden observar gaviotas patiamarillas, cormoranes moñudos, alcas y araos.
    
Con el grupo viendo el ecosistema de la isla llegamos hasta la playa de Nosa Señora donde nosotros decidimos quedarnos a comer y ver esa playa.
   
Las guías nos explicaron todo sobre los líquenes de las rocas y sobre el desastre que hizo la tragedia de Prestige. Nos hablaron de piratas, leyendas y gentes que habitaron las islas, y el último habitante que murió el año pasado que vivía en una casa sobre la playa de Nosa Señora.
    
Paseamos con las guías hacia la parte del faro pero llegó la hora de comer no subimos, nos paramos para comer la empanada cerca de la playa del Nosa Señora.
   
Cuando estábamos comiendo la empanada en un banquito del camino, las gaviotas vinieron a comer con nosotros, una graznaba y llamaba a las otras. Pensábamos que nos iban quitar de las manos la comida y nos fuimos del lugar.
 
Después de comer subimos ya por nuestra cuenta por la Ruta del Alto del Príncipe y las puestas de sol para aventureros tienen que ser magníficas. Este recorrido asciende lentamente desde el muelle de Rodas hasta los abruptos acantilados de la isla de Monteagudo. La Ruta del Alto do Príncipe también comienza en la caseta de información, pero en vez de cambiar de isla a través del dique.
     
Cuando bajamos nos refrescamos en la playa de Figueiras y pasamos un buen rato descansando y sacando fotos.
          
LLegó la hora de volver con mucha pena de dejar este paraíso de la naturaleza.
¡¡Espero que os haya gustado!!
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Buenas noches Mamen! Unas preciosas fotos que me han traído muy buenos recuerdos de cuando hice esta visita hace cinco años. Me alegra que te lo hayas pasado tan feliz.
ResponderEliminarBesos.
Es naturaleza con todo su paisaje de arenas blancas, agua turquesas y verde de los árboles. Me gustó mucho visitar estas islas. Un abrazo.
EliminarMuy bonitas fotos, de un lugar mágico y esquivo.
ResponderEliminarUn abrazo
Un lugar muy bonito, mágico, natural. Me gustaría volver a visitarlo. Un abrazo.
EliminarQué envidia,... parece que no había mucha gente,... son fantásticas verdad? Ahora os la recomiendo un día con un poco de temporal.
ResponderEliminarNorte también quedó fascinado por su belleza,... te dejo un enlace:
https://www.elbailedenorte.com/2015/05/las-islas-de-los-dioses.html
Feliz domingo!
No había mucha gente era lunes. Tu relato maravilloso y buenas fotos. Un abrazo.
EliminarSegún los celtas, en las islas Cíes moraban los dioses, y no me extraña porque el lugar es estupendo y los dioses suelen tener buen gusto.
ResponderEliminarLa subida a Monte do Príncipe a mí me encantó y las vistas son espectaculares.
He ido varias veces, una de ellas pernocté en el camping y el atardecer es de esos que no se olvidan nunca (y el escándalo de las aves tampoco).
La última vez que fui tuvimos mal tiempo al principio, la bruma apenas dejaba ver nada pero ese halo de neblina le daba un encanto especial, era más mágico.
Luego despejó, y pudimos ver el paisaje en todo su esplendor.
Un lugar para volver sin ninguna duda.
Un besote.
Es lugar para volver si se viaja a Galicia. Islas de Dioses. Un abrazo.
EliminarMaravilloso lugar en el que pasamos un calor terrible. Es la única vez en que me he movido por la vida con sombrero.
ResponderEliminarTienes unas fotos muy logradas de los pajaritos. Y esa empanada da una envidia...
Un beso.
Yo no pasé calor, se estaba de maravilla, hizo un día para no sudar. La empanada de zamburiñas riquísima.Compramos otra para traer a casa. Un abrazo.
EliminarAyyy qué nostalgia.
ResponderEliminarMe encantan las fotos y como lo cuentas.
Muy feliz semana.
Muchas gracias por tu visita Marigem veo que madrugas quizás con tu gato en tu colo. Un abrazo.
ResponderEliminar¡Qué preciosas fotografías nos compartes! estimada Mamen, gracias una vez más por incluir esas notas informativas y de interés cultural de esta joya (bellísimo archipiélago en la boca de la ría de Vigo).
ResponderEliminarLas empanadas gallegas son otra de mis debilidades.
Me alegro de que disfrutaseis de esta nueva excursión.
Un abrazo.
Muchas gracias Estrella por tu visita, todo comentario suma en favor a este lugar. Un abrazo.
EliminarEs un lugar al que he ido ya cuatro o cinco veces y no me canso de recomendar.
ResponderEliminarGracias por tus fotos.
Besos.
Es para recomendar, y pensar que cuando fui mi primera vez a Vigo ni las vi en el paisaje porque había mucha niebla, estuve tres días por la costa y no pude ver nada. Un abrazo.
EliminarQué recuerdo me has traído, Mamen.
ResponderEliminarUn reportaje muy bonito de un maravilloso lugar.
Un fuerte abrazo.
Me imagino que ya lo has disfrutado, es un paraíso. Un abrazo.
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